La paternidad baja los niveles de testosterona (la hormona masculina por excelencia) y saca a la luz el lado más femenino de los hombres. Esto es lo que postula un trabajo realizado por científicos americanos.
Según este estudio, cuanto mayor es el compromiso de los padres con la crianza de los hijos, más baja es la presencia de la hormona masculina.
Los autores del estudio, científicos de la Universidad Northwestern, afirmaron que los varones que pasaban más de tres horas cuidando a sus hijos presentaban los niveles más bajos de los medidos en una muestra de la que participaron 600 individuos.
Para los especialistas, el estudio demuestra que el organismo masculino se prepara biológicamente para que los hombres participen de la crianza de sus hijos.
Uno de los investigadores destacó que estos resultados podrían aportar claves sobre la biología de la paternidad y arrojar luz acerca de los mecanismos que participan de la fluctuación de las hormonas durante la vida humana, así como también, contribuir a conocer más sobre el papel de la testosterona en problemas médicos, como el cáncer de próstata.
La caída de los niveles de testosterona no es problemática ni provoca trastornos como la pérdida de masa muscular, la caída del pelo o la merma del deseo sexual.
El mecanismo descripto en el estudio que publicó la revista especializada Proceedings of The National Academy of Science muestra un proceso más sutil, en el que el organismo del varón parece prepararse para participar de la crianza de los hijos.
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