lunes, 23 de noviembre de 2009

Inglaterra: prostitución y tecnología



Una científica británica (Brooke Magnanti, especialista en cáncer infantil) que trabaja como investigadora en la Universidad de Bristol recibió el respaldo de su empleador tras revelar que era la autora de un blog donde revelaba las vivencias de una prostituta.

La doctora Brooke Magnanti, de 34 años, confesó este fin de semana al diario Sunday Times que fue ella quien, bajo el seudónimo de "Belle de Jour", relató sus experiencias durante los dos años en los que, para financiar sus estudios de doctorado, trabajó en una agencia de prostitución de lujo.

Magnanti detalló estos encuentros durante los años 2003 y 2004 en un blog que se hizo muy popular y en un libro publicado al año siguiente (2005) bajo el título "Las aventuras íntimas de una prostituta de Londres". El libro inspiró, a su vez, una serie de televisión de 16 capítulos que se emitió en varios países.

La revelación puso fin a seis años de especulaciones sobre la misteriosa identidad de la prostituta.


La doctora Brooke Magnanti tomó (en su blog) el seudónimo de "Belle de Jour" de una película (1967) de Luis Buñuel en la que Catherine Deneuve interpretaba a una común madre de familia que trabajaba por las tardes en una casa de citas.

La señora Magnanti trabaja actualmente en una investigación sobre los efectos que puede tener en los bebés la exposición de sus madres a los productos químicos tóxicos, en un instituto perteneciente a la Universidad de Bristol, el Bristol Initiative Research of Child Health.


"Es una investigadora, es sólo un miembro del personal y lo que hizo en el pasado no tiene relevancia para lo que hace actualmente", comentó un portavoz de la Universidad.


En su blog, la doctora Magnanti explicó que había decidido salir a la luz porque "mantener una doble vida" era "demasiado difícil a largo plazo" y que, con los años, se dio cuenta de que su vida de prostituta sería siempre "una parte" de sí misma.

Afirma que se siente "mejor" por "no tener que mentir y ocultar cosas a la gente que me importa".



Las siguientes son antigüedades: “sexo por dinero”, “el oficio más antiguo del mundo”, “todas lo son”, “reputa con mi marido”, “prostituta con libreta”, “billetera vence galán” y la lista es larga.

Prefiero detenerme en ese momento de soledad, como el eterno girar de los cuerpos celestes en el infinito espacio, en que la doctora Magnanti decidió contar a la especie humana una experiencia, tal vez, no excesivamente grata. También esto es frecuente pero ella tuvo la posibilidad de hacerlo por unos pocos dólares y el conocimiento de ciertos rudimentos informáticos. A un clic de decir “su” verdad; esto no es tan antiguo; ¿un lustro?

También, me resulta interesante la declaración del portavoz de la universidad: “lo que hizo en el pasado”. ¿Prohibirá el ejercicio de la prostitución, el contrato entre la doctora Magnanti y la universidad? Los contratos hay que respetarlos pero las cláusulas de los contratos que no puedan mensurarse carecen de valor jurídico.

Por último, el relato habla de una alta profesionalidad de la “agencia de prostitución”. ¿Cuándo una sociedad es eficiente, es eficiente en todo? ¡Qué cagada!

lunes, 16 de noviembre de 2009

POLICÍAS PARA LA REINA



Scotland Yard planea reclutar a policías gays para proteger a la reina Isabel II de Inglaterra, en un hecho que fue calificado como "totalmente absurdo y ridículo" por políticos y ex agentes de seguridad. El diario londinense Daily Express reveló que las autoridades de la Policía Metropolitana quieren que los nuevos agentes "de grupos especiales", incluidos homosexuales, lesbianas y bisexuales, protejan a la monarca y al resto de “la familia real” en los palacios de Londres, en el Castillo de Windsor, y el Palacio de Balmoral, en Escocia.
Scotland Yard lanzó el operativo de reclutamiento luego de ser informado que el cuerpo de guardaespaldas de Isabel II no cuenta con suficientes policías gays, bisexuales y travestis.
El programa de reclutamiento fue lanzado por el grupo SO14 de Scotland Yard, conocido como la Unidad de Protección Real. Los 30 policías reclutados "deberán ofrecer protección a miembros de la Realeza desde todo tipo de puestos y patrullas móviles".
Los candidatos exitosos deberán trabajar en palacios en Londres o en el Castillo de Windsor y también tendrán que realizar tareas en Escocia, y se "dará la bienvenida" a postulantes "homosexuales, lesbianas, bisexuales y travestis, como también a minorías étnicas", ya que estos "están mal representados dentro del SO14".


Según la gramática cristiniana: “el monarco” y “la monarca” como se dice “el estudiante” y “la estudianta”. ¡Esto es cultura, carajo!

lunes, 9 de noviembre de 2009

DÍAS DE HOTEL



Anónimo


La conserje ingresó al amplio, confortable y vidriado vestíbulo del hotel y con gestos mecánicos fue ordenando revistas, alfombras y muebles que encontraba a su paso.

Su cuerpo joven y su pelo recién lavado invadieron la totalidad del alfombrado ambiente.

Antes de que llegara al mostrador sonó el timbre de la central telefónica.

- "Bueno, ya se lo envío", contestó mientras guardaba su mochila en un placard.

Cuando se quitaba la campera de gamuza, sonó nuevamente el teléfono. Escuchó con atención y dijo:

- "¿Puede ser la 24?; sí, como no" y se ajustó el cierre de su vaquero.

Leyó en el libro de registros: “Reserva: habitación 62. Nombre: Claudio García”.

Acomodó algunos sillones del palier; protestó en voz alta por los ceniceros sucios: “el del otro turno se vive borrando” y encendió el televisor en un canal de noticias.

A las tres horas, traspasó la puerta del hotel una mujer de unos 40 años, gorda, pelo rojizo y de presencia altanera; unos pasos atrás un hombre de unos 30 años, flaco, con largos pelos que escondían su rostro.

La mujer se acercó al mostrador y le dijo a Daniela, la conserje:

- "La reserva a nombre de Claudio García."

- “¿Es para un...?”

- “…habitación para dos”, afirmó con tono inequívoco la recién llegada.

- “Bueno, entonces la 33. ¿Cuántos días se quedarán?”

- “No sabemos aún.”

Daniela los acompañó hasta la habitación.

A la noche, la mujer bajó sola; se puso a mirar televisión y le hizo a la conserje algunas preguntas triviales acerca del tiempo y lugares para conocer en la ciudad.

Daniela contestó escuetamente; no había amabilidad en el diálogo, tampoco hostilidad.

Al día siguiente, Daniela observó en la planilla los pedidos de la habitación 33: comida y alguna bebida.

Por la noche, se repitió la secuencia, sólo la mujer bajó.

Estaba con cara de pocos amigos pero hacia la conserje se dirigió con cierta cordialidad y la invitó a tomar una cerveza con ella.

Cuando Daniela se sentó, le dijo:

- "No me coge."

Sorprendidísima, la joven respondió:

- "…bueno." La rubia insistió:

- “¡Es que no me coge!”

El timbre del teléfono le permitió a Daniela salir de la situación y volver al mostrador.

La cuarentona terminó la cerveza y se fue a su habitación.


A la tercera noche, se volvió a repetir el ritual: la rubia bajó sola; él nunca había bajado pero ahora, entre la conserje y la pasajera se había establecido un corriente de simpatía. Cuando Daniela pasó al lado del mullido sillón que ocupaba la huésped en el generoso vestíbulo, (sin poder contener su curiosidad) con la barbilla le hizo un gesto de interrogación.

- “No me coge”, volvió a repetir como una letanía.

- “¿…lo estimulaste?”, preguntó con rubor la conserje.

- “Sí; pero no me coge.”

No tenía otras palabras.

Al cuarto día, finalmente, bajó de la habitación.

Llegó un auto negro imponente, lujoso, con un moño en el techo. Ella vestida de novia; él (quien miró tímidamente a Daniela) de frac; ambos subieron al auto.


miércoles, 4 de noviembre de 2009

MANO DURA

Los padres de una niña menor de 11 años, en el norte de Colombia, acusaron a un sacerdote católico de haberla golpeado porque la niña recibió la hostia y en lugar de “tragarla” se dirigió hasta donde estaban sus hermanos para mostrarles “el cuerpo sagrado”.

En declaraciones a periodistas televisivos locales, Samuel Martínez, el padre de la pequeña, dijo que la situación se presentó en la iglesia "El Santísimo Cristo" de la población de La Loma, en el departamento de Cesar (norte).

"La niña no tragó la hostia, sino que fue a mostrársela a sus hermanos, pero el sacerdote la persiguió, se la arrebató y le metió una cachetada", detalló Martínez, quien lamentó la forma de proceder del sacerdote Ramón Muñoz.

La mamá de la menor indicó que ella, al igual que su hija, fueron “presas de pánico” y ella (la madre) no pudo reaccionar pues el susto por la forma de proceder del sacerdote la paralizó.

Agregó que la niña quedó incapacitada y que actualmente recibe tratamiento psicológico por lo sucedido y no quiere regresar al colegio ni hablar con nadie, excepto con su bisabuela.

Los padres de la menor pusieron el caso en manos de las autoridades judiciales y periodistas locales indicaron que, aunque lo buscaron, no fue posible ubicar al sacerdote católico.


Versiones (no confirmadas) en la Argentina señalan que es intención del diputado nacional Francisco de Narváez tramitar el pase del sacerdote Ramón Muñoz como cabeza de una diócesis importante de la provincia de Buenos Aires, si llegare a ser electo gobernador de la mencionada provincia argentina. Entre las diócesis que figuran en carpeta, según esos rumores, estaría la de San Isidro, La Plata o Mar del Plata. Lo que da una peregrina sospecha de veracidad al rumor es que tanto el religioso Ramón Muñoz como el diputado nacional Francisco de Narváez (probable candidato a gobernador en la provincia de Buenos Aires) nacieron en Colombia como el Pibe Valderrama; ¡sí, aquel del 5 a 0 en el Monumental!



lunes, 2 de noviembre de 2009

40, COMO LOS LADRONES


La periodista sudanesa Lubna Ahmed al Hussein, que podría haber sido condenada a recibir 40 latigazos por usar pantalones en público, fue castigada, el lunes, a una multa de 200 dólares por el tribunal de Jartum (Sudán), según testigos que asistieron a la audiencia.


La periodista fue condenada a pagar una multa de 500 libras sudanesas (200 dólares USA) y, en caso de no pagarla, deberá purgar una pena de un mes de cárcel.

Los periodistas no tuvieron acceso a la sala de audiencia.

"No voy a pagar la multa, prefiero ir a la cárcel", dijo la periodista en declaraciones telefónicas. Sus abogados declararon que tratarán de convencerla para que pague.

Lubna Ahmed al Hussein fue detenida a principios de julio por policías cuando se encontraba en un restaurante vestida con pantalón y blusa.

Diez mujeres, detenidas al mismo tiempo que ella, fueron condenadas y recibieron diez latigazos.

Lubna Ahmed al Hussein hubiera podido sufrir el mismo castigo o más, ya que la norma legal establece un máximo de cuarenta latigazos, pero contestó los cargos y emprendió una campaña pública con el objetivo de abolir la controvertida ley en la que se basan las autoridades para condenarla.

El artículo 152 del código penal sudanés de 1991, que entró en vigencia dos años después del golpe de estado del actual presidente Omar el Bechir, prevé una pena máxima de 40 latigazos para toda persona que "comete un acto indecente, un acto que viola la moralidad pública o que utiliza vestimentas indecentes".


Sólo múltiplos de 10 como en los cajeros automáticos: 10 ó 40. ¿Cuántos le hubiera aplicado mi amigo Horacio con quien hace tantos años no estrechamos las manos?