Hasta hace algunos años, el cigarrillo era patrimonio mayoritario de los hombres. Sin embargo, hoy la realidad marca que pese a los esfuerzos y las campañas realizadas en diversos países, en todo el mundo hay casi 250 millones de fumadoras. Esta realidad se vuelve más alarmante aún porque los analistas y médicos especializados en tabaquismo marcan que en 20 años podría duplicarse la cantidad de mujeres fumadoras. En parte, debido a la acción de la industria tabacalera que a través de sus sucesivas campañas de marketing asoció la imagen de la mujer fumadora al glamour, el éxito, la independencia y la sofisticación.
“A la industria tabacalera, le interesa la mujer por muchos motivos; especialmente, por la influencia que tienen sobre sus hijos. Cuando la mamá fuma es más probable que los chicos desarrollen el mismo hábito. También es posible que se fume más y se deje de lado el concepto de 'hogar 100 por ciento libre de humo'. No es lo mismo cuando el fumador es el padre.” Afirman los especialistas en tabaquismo.
"Por otro lado –añaden los especialistas- en la mujer, el tabaquismo y la perpetuación de este hábito tan nocivo está asociado a diferentes mitos o errores, como por ejemplo, la posibilidad de mantener el peso adecuado y no engordar".
Lo negativo de esta realidad es que al ritmo que crece la cantidad de fumadoras, se incrementan en ellas los problemas de salud asociados al tabaquismo. Ocurre que tal como lo confirman diferentes estudios, el cigarrillo enferma más a la mujer que al hombre, entre otras razones porque en el sexo femenino las arterias y los pulmones son más chicos, lo que implica que la mujer tenga menor resistencia que el varón frente a la acción del cigarrillo.
"Las mujeres contraen cáncer de pulmón más rápido que los hombres”, destacan los neumonólogos, debido a que toleran menos la exposición al humo del tabaco. Adicionalmente, los adenocarcinomas son más frecuentes entre las mujeres que en los hombres.
Otras afecciones que suelen presentarse en la mujer fumadora incluyen al cáncer del cuello uterino, la enfermedad ósea, la infertilidad y la menopausia prematura. También se registra una mayor mortalidad en el caso de las mujeres que fuman y tienen cáncer de mama.
"En este sentido, es importante destacar que aproximadamente 1,5 millones de mujeres mueren en el mundo cada año a causa del cigarrillo", añadió el especialista.
Los especialistas consideran que los efectos del consumo de tabaco durante el embarazo incluyen dificultades durante la gestación, al momento del parto y durante la lactancia; bajo peso al nacer; posibles efectos a largo plazo en el bebé y predisposición de adicción a la nicotina en los niños.
(Siempre, admiré la inteligencia de la mayoría de las mujeres que he tratado. No obstante, el tabaquismo y el uso de zapatos de tacos altos me hacen dudar de la inteligencia de la mujer.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario